Extraño oficio este el de vivir.
Dibujamos palabras, y sin embargo perdemos ideas.
Amamos y nos gusta alejar al amor por que no sabe anidarse en nuestras palabras.
Enseñamos y casi nunca aprendemos.
Sabemos de instantes y no de la eternidad.
Buscamos en la obscuridad y no encendemos la luz de los sentimientos.
Rechazamos y acudimos al encuentro con otros.
Queremos y dejamos.
Deseamos y tememos.
Nos rendimos e iniciamos de nuevo.
Perdonamos y no nos perdonamos.
Cantamos a solas, bailamos cuando nadie nos ve, y reímos por las noches.
Miramos de reojo, huimos de los escotes y de las miradas de las mujeres.
Esperamos besos y lanzamos deseos como barcas en la mar.
Encontramos caricias guardadas en cajones, de manos perdidas.
Besamos con los ojos cerrados, y amamos sin sentido.
Nos quejamos del mundo y al mundo vamos.
Recordamos amores, mujeres y besos perdidos.
Anhelamos ser queridos y querer.
Deseamos estar detrás de ti, de frente a la luna y jugando con tu cabello.
Renacemos por las mañanas y morimos en tus sueños.
Somos todos parte de ti y sin embargo aquí hoy no se ni tu nombre ni como amarte.
Extraño este oficio de vivir… confuso e ilógico.
Estraño este oficio de ser cuando tu no estas aquí.